Los beneficios de la meditación en niños
En la actualidad, a muchos niños y niñas les cuesta concentrarse en la escuela y se sienten nerviosos e intranquilos. Como respuesta a esta necesidad, la meditación y la relajación han adquirido una gran importancia, ya que se han convertido en herramientas que ayudan a los a niños a estar más tranquilos y a sentirse mejor con ellos mismos.
El mindfulness es un tipo de meditación que proporciona tranquilidad tanto en el plano físico como mental. Ayuda a prestar atención al momento presente, es decir, aprendemos a ser más conscientes de cómo nos sentimos en este mismo instante adaptando una actitud comprensiva libre de juicios y opiniones. Así, el niño aprende a detenerse y observar la situación en la que se encuentra identificando las emociones y pensamientos que experimenta y evitando actuar de forma impulsiva. Se trata de no dejarse llevar por las emociones y pensamientos que surgen, sino meditar sobre cuál es el mejor modo de responder ante un determinado problema o situación.
Se ha demostrado que los niños que practican el mindfulness de forma regular son más exitosos en las tareas escolares, mejoran su concentración y se muestran más amables con sus compañeros de clase. Además, son más capaces de pararse y pensar las formas de actuar ante una situación, reduciendo así las reacciones impulsivas. Por último, aprenden a no reprimir sus pensamientos y emociones y a aceptarlos tal y como se dan en cada momento.
Como todo aprendizaje, el mindfulness requiere de entrenamiento y práctica para conseguir los beneficios mencionados con anterioridad. Aunque al principio pueda resultar difícil, poco a poco irán adentrándose en la dinámica de la meditación y comenzarán a experimentar grandes cambios en su forma de ver el mundo y afrontar la vida.